El día de hoy 11 de marzo de 2022, nuestra sede casa Misericordia se llena de alegría, porque ha culminado gratamente nuestro proyecto Educación laboral juvenil en los cursos de Pan de Dios en el área Panadería y el curso de Corte, Costura y Confección, que comenzaron en noviembre.
Los participantes de cada curso estaban muy emocionados y nerviosos, pero muy contentos por la nueva experiencia, ahora se vuelven aprendices en sus áreas, esperamos que sigan aprendiendo este oficio que les gusta y se vuelvan profesionales al servicio de Dios y del prójimo.
Los nuevos aprendices en el área de panadería son: Dante Guzmán, Victoria Narváez, Oriana Velásquez, Manuel Reyes. Desde noviembre a marzo, aprendieron lo básico en este oficio, como por ejemplo: Las normas para un trabajo seguro y eficiente en un centro de producción panadera, nociones fundamentales de higiene y manipulación de alimentos, proceso de panificación, preparación de recetas: pan pita, masa para pizza, pan francés, pan canilla, pan piñita, pan bolillo, catalina, pan dulce tipo bombón y pan para hamburguesas. De igual manera recibieron una educación espiritual para su crecimiento y relación con Dios, aprendiendo que: Soy hijo amado de Dios, El Padre misericordioso, el amor del prójimo, el amor incondicional, la unión en comunidad.
Es importante recalcar que además se educaron para su crecimiento personal y ciudadano, conociendo sobre: El ser humano un individuo integral, identidad y desarrollo psicosexual, la unión en pareja, la familia espacio para vivir con dignidad.
Las jóvenes aprendices de Corte, Costura y Confección son: Mireya Rojas, Greixy Mota, Mariangel Vásquez, Daviannis Villanueva y Camila Rodríguez; estas 5 jóvenes son de la comunidad de Pedro Luis Briceño, y algunas tienen relación con Zdenac Aljibe. En este curso aprendieron sobre: Origen e importancia de la costura, los materiales e implementos y su utilidad, definición de términos básicos, práctica de remarcado y corte de los patrones en papel y tela, tipos de patrones aprendidos: franela, short, bermuda, blumas, cotillas y falda, técnica de basteado, manejo y dominio de la máquina doméstica e industrial identificando sus partes y su utilidad.
Estas jóvenes también fueron formadas para su crecimiento personal y ciudadano, los temas que trataron fueron: Modales y hábitos para la convivencia armónica: saludar, trato a adultos y jóvenes, agradecimiento y despedida. Postura básica para sentarse y estar de pie, reconocimiento de debilidades y fortalezas personales para el logra de objetivos.
Estamos profundamente agradecidos con todas las personas que hicieron todo esto posible, deseándole los mejores deseos, pidiéndole a Dios que los proteja y bendiga siempre; a todos los voluntarios que dieron los mejor de sí para formar estos aprendices, por dedicarle su tiempo y amor a este proyecto.
“Este curso ha sido excelente y tiene mucho significado para mí, aprendí cosas nuevas que me serán muy útiles para mi día a día” Vitoria Narváez
“Me gustó mucho esta experiencia, nos tratamos como familia, todo el curso estuvo muy organizado. Me sentí muy a gusto con el contenido, con los valores que nos inculcaron y la importancia de la higiene. Los voluntarios de Zdenac Aljibe fueron muy atentos. Le doy gracias a por tener a mi lado tan buenas que me quieren ayudar en mi formación.” Oriana Velásquez
“Mi experiencia en el curso pan de Dios fue bastante agradable, aprendí una gran cantidad de valores tanto humanos como espirituales, además de aprender a hacer distintos tipos de pan, también la experiencia en la panadería me fue de mucho agrado. Con todos estos conocimientos ahora puedo tener un recurso más para mi vida, puedo hacer panes para mí y mi familia, puedo trabajar y emplear un oficio con estos conocimientos, también, los valores que nos inculcaron allí me han enseñado como vivir una mejor vida en dignidad, la importancia de tener una familia estable, conocí que son realmente los seres humanos, entre otras cosas” Dante Guzmán
“Me siento muy agradecida con Zdenac-Aljibe M.M.M.M. por haberme brindado la oportunidad de formar parte de este proyecto, también estoy agradecida con la voluntaria Marys Martínez instructora del curso de Costura por toda su dedicación, apoyo y enseñanza, porque antes no sabía nada, ahora sé confeccionar mi propia ropa. Estoy creciendo espiritual y personalmente por la formación que recibí de los voluntarios Iliana Gómez y Orlando Guzmán. Este curso tiene mucho valor para mí, espero que el Señor bendiga siempre a todos los que hicieron posible con su aporte que estuviesen las máquinas acá.” Mariangel Vásquez
Dios los ama.