Primera Lectura
Lectura del libro del Génesis. [Gén 39-15]
CUANDO Adán comió del árbol, el Señor Dios lo llamó y le dijo:
«¿Dónde estás?».
Él contestó:
«Oí tu ruido en el jardín, me dio miedo, porque estaba desnudo, y me escondí».
El Señor Dios le replicó:
«¿Quién te informó de que estabas desnudo?, ¿es que has comido del árbol del que te prohibí comer?».
Adán respondió:
«La mujer que me diste como compañera me ofreció del fruto y comí».
El Señor Dios dijo a la mujer:
«¿Qué has hecho?».
La mujer respondió:
«La serpiente me sedujo y comí».
El Señor Dios dijo a la serpiente:
«Por haber hecho eso, maldita tú
entre todo el ganado y todas las fieras del campo;
te arrastrarás sobre el vientre
y comerás polvo toda tu vida;
pongo hostilidad entre ti y la mujer,
entre tu descendencia y su descendencia;
esta te aplastará la cabeza cuando tú la hieras en el talón».
Palabra de Dios.
Salmo
Salmo responsorial: Sal 129, 1b-2. 3-4. 5-7ab. 7cd-8 (R/.: 7cd)
R/. Del Señor viene la misericordia, la redención copiosa.
V/. Desde lo hondo a ti grito, Señor;
Señor, escucha mi Voz;
estén tus oídos atentos
a la voz de mi súplica. R/.
V/. Si llevas cuenta de los delitos, Señor,
¿quién podrá resistir?
Pero de ti procede el perdón,
y así infundes temor. R/.
V/. Mi alma espera en el Señor,
espera en su palabra;
mi alma aguarda al Señor,
más que el centinela la aurora.
Aguarde Israel al Señor,
como el centinela la aurora. R/.
V/. Porque del Señor viene la misericordia,
la redención copiosa;
y él redimirá a Israel
de todos sus delitos. R/.
Segunda Lectura
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los Corintios. [2 Cor 4, 13 — 5, 1]
HERMANOS:
Teniendo el mismo espíritu de fe, según lo que está escrito: «Creí, por eso hablé», también nosotros creemos y por eso hablamos; sabiendo que quien resucitó al Señor Jesús también nos resucitará a nosotros con Jesús y nos presentará con vosotros ante él.
Pues todo esto es para vuestro bien, a fin de que cuantos más reciban la gracia, mayor sea el agradecimiento, para gloria de Dios.
Por eso, no nos acobardamos, sino que, aun cuando nuestro hombre exterior se vaya desmoronando, nuestro hombre interior se va renovando día a día.
Pues la leve tribulación presente nos proporciona una inmensa e incalculable carga de gloria, ya que no nos fijamos en lo que se ve, sino en lo que no se ve; en efecto, lo que se ve es transitorio; lo que no se ve es eterno.
Porque sabemos que si se destruye esta nuestra morada terrena, tenemos un sólido edificio que viene de Dios, una morada que no ha sido construida por manos humanas, es eterna y está en los cielos.
Palabra de Dios.
Evangelio
Lectura del santo Evangelio según san Marcos. [Mc 3, 20-35]
EN aquel tiempo, Jesús llegó a casa con sus discípulos y de nuevo se juntó tanta gente que no los dejaban ni comer. Al enterarse su familia, vinieron a llevárselo, porque se decía que estaba fuera de sí.
Y los escribas que habían bajado de Jerusalén decían:
«Tiene dentro a Belzebú y expulsa a los demonios con el poder del jefe de los demonios».
El los invitó a acercarse y les hablaba en parábolas:
«¿Cómo va a echar Satanás a Satanás? Un reino dividido internamente no puede subsistir; una familia dividida no puede subsistir. Si Satanás se rebela contra sí mismo, para hacerse la guerra, no puede subsistir, está perdido. Nadie puede meterse en casa de un hombre forzudo para arramblar con su ajuar, si primero no lo ata; entonces podrá arramblar con la casa.
En verdad os digo, todo se les podrá perdonar a los hombres: los pecados y cualquier blasfemia que digan; pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo no tendrá perdón jamás, cargará con su pecado para siempre».
Se refería a los que decían que tenía dentro un espíritu inmundo.
Llegan su madre y sus hermanos y, desde fuera, lo mandaron llamar.
La gente que tenía sentada alrededor le dice:
«Mira, tu madre y tus hermanos y tus hermanas están fuera y te buscan».
Él les pregunta:
«Quiénes son mi madre y mis hermanos?».
Y mirando a los que estaban sentados alrededor, dice:
«Estos son mi madre y mis hermanos. El que haga la voluntad de Dios, ese es mi hermano y mi hermana y mi madre».
Palabra del Señor
Para el crecimiento espiritual de los miembros de Zdenac
En la primera lectura leemos el primer anuncio del evangelio. El primer anuncio de la buena nueva del nacimiento del que herirá la cabeza de la serpiente. A la debilidad humana y al pecado humano Dios responde con misericordia. Después del primer pecado, Dios Creador habla de la Mujer y su descendiente que derrotará al Maligno. Todos estamos llamados a participar tanto en la lucha como en la victoria de Cristo.
Miembros de Zdenac, renunciemos al Maligno y todo lo que no es bueno; creamos en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo; defendamos la vida en la plenitud a la medida del hombre.
Toda nuestra vida es una lucha, pero bajo el signo de la Pascua. En cada uno de nosotros hay un hombre exterior - el que no es de Dios, pero mediante una lucha persistente contra el mal y un compromiso con el bien, en nosotros crece y se renueva el hombre interior.
La palabra de Cristo, y especialmente su persona, se nos revela cada día de nuevo, cuando le abrimos tanto nuestro corazón, como nuestra alma, y toda nuestra vida, pública y privada.
Por la fe aceptemos la salvación que se nos ofrece a todos en Cristo.
Jesús es persistente. Resistirse a los seres queridos, así como a las autoridades sociales y las élites no es nada fácil. Él trata de explicarles con sentido común lo ilógico que es lo que están diciendo.
Miembros de Zdenac, ¿y nosotros, somos persistentes? ¿Estamos resistiendo a nuestros más cercanos, a nuestras autoridades, estamos tratando de explicarles lo que estamos haciendo?
¿Cómo explicarles que se oponen a la misericordia de Dios? Nosotros solo somos una herramienta en las manos de Dios.
Mientras descuidemos el discurso de la conciencia, mientras justifiquemos nuestro pecado, mientras no resistamos el mal, nos esconderemos de Dios.
Jesús no lo quiere, ni nosotros lo queremos. Jesús nos llama a la conversión, quiere que hagamos la voluntad de Dios. Esto a menudo significa un conflicto con los más cercanos. No es fácil. Pero tomemos en cuenta: somos su imagen. Cuando buscamos y hacemos la voluntad de Dios, entramos en una relación especial con Cristo; nos convertimos en participantes de su gloria.
Conectados con Cristo, estamos llenos de la esperanza de que lograremos nuestro objetivo - la eterna comunión de amor con Dios y entre nosotros. El amor a Dios y al prójimo es el mandamiento nuevo de Cristo. Dios nos da la fuerza para cumplirlo con alegría.
N.M.
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Lo visible roba lo invisible
Para el crecimiento espiritual de los miembros de Zdenac
Espíritu Santo, ilumine nuestras mentes y nuestros corazones, para que nos demos cuenta de que lo eterno se esconde en lo temporal; para que podamos distinguir lo transitorio de lo eterno. Llénanos de ti mismo, para que siempre podamos responder a Dios dónde estamos y qué estamos haciendo.
En la primera lectura del libro del Génesis, Dios le habla al hombre, luego le pide una explicación a Eva, y concluye con las palabras de maldecir a la serpiente-causante del pecado y la desnudez de los padres originales de los humanos.
Estar con Dios es estar vestido de Su gracia, de un sentido de seguridad, amor, abundancia, libertad, paz, gozo, confianza. Excluye todo tipo de miedo y miseria.
Serpiente-Satanás aprovechó el momento de la separación de Eva de Dios y Adán. Llamó su atención sobre lo visible, lo periférico, lo palpable, lo deseable para los ojos. Le presentó a Dios como un enemigo que no les permite ser como Él. Esta fue una oportunidad para que la gente disfrutara de manera rápida y atractiva de todo lo que Dios posee, y más aún, para que se hicieran dueños de su felicidad eterna.
Dios no condena a Adán y Eva. Planteó la enemistad entre la serpiente-Satanás y la mujer. La guerra continuará entre sus familias. Esa guerra empieza con el bautismo de cada cristiano y termina con la muerte física y la resurrección de entre los muertos. Pablo llama a esta guerra la „leve tribulación momentánea” que „produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria”. Porque lo visible es temporal y lo invisible es eterno. Nuestro cuerpo es una morada terrestre, un tabernáculo temporal. Nuestro edificio es de Dios, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos.
Tenemos en nuestro corazón y ante nuestros ojos espirituales esta casa no hecha de manos mientras luchamos con los bienes creados de esta vida terrenal.
En el Evangelio de Marcos, Jesús nos indica, con su actitud y con sus palabras, cómo entender qué es temporal y qué es eterno, y cómo actuar. La situación es compleja y complicada. Después de muchos días de caminar por otras ciudades y lugares, Jesús con los discípulos regresa a casa. Tienen hambre. El hambre se acompaña de agotamiento físico y nerviosismo. Son al borde de sus fuerzas. La gente se agolpa frente a su casa e ignora sus necesidades. Este cansancio es suficiente para que Jesús cierre la puerta y envíe a la gente de donde venían.
Jesús actúa no según su sentimiento humano, sino según la misericordia de Dios. La gente lo necesita, tiene hambre de sus palabras, sus curaciones, su aliento y guía.
Jesús, los límites de mi cuerpo son a menudo una excusa para cerrar la puerta y quedarme viendo la televisión. Mi mal humor es muchas veces la razón por la que no estoy disponible para Tí, con el pretexto de "No me siento de humor..." Ten piedad de mí y ten piedad de todos los miembros de Zdenac que están expuestos a los frecuentes golpes de la Tentación en el propio cuerpo y al disgusto emocional. Que tu Espíritu nos lleve en alas de la fe y voluntad más allá de nuestros límites.
Los eruditos bíblicos - escribas, declaran que Jesús está poseído por Belcebú, el señor de todos los demonios; el mismo Satanás que persuadió a Eva que tomara el fruto, aquel a quien Dios maldijo y a quien declaró enemigo eterno. Jesús explica vívidamente a la gente que Satanás no irá contra sí mismo. Los escribas proclaman que la amistad, la cercanía y la ayuda a las personas son obra de Satanás. Todo el bien - pero hasta ahora sin precedentes - que hace Jesús, los escribas lo interpretan como una violación de las leyes y los mandamientos de Dios.
Jesús, estamos expuestos a las críticas de los conocedores de las Sagradas Escrituras de hoy. Nos retiramos ante ellos con la excusa de que lo saben todo, y que siempre tienen la razón; incluso cuando no hacen nada de las obras que hizo Jesús y por las que la gente lo buscaba. Perdónanos por retirarnos por el temor a lastimarlos – los escribas de hoy.
La madre y los hermanos de Jesús vinieron a calmarlo y llevarlo a casa porque les dijeron que su Jesús estaba "fuera de sí". La gran trampa de Satanás que se ha infiltrado entre los familiares de Jesús para distraerlo de su misión y acción de salvar la gente, sus almas. Los familiares no pecaron pero se convirtieron en un obstáculo visible y una trampa emocional para Jesús. Pero Jesús reconoce la trampa y establece una relación familiar con todos los que lo escuchan. Su conexión con Él es eterna, invisible para este mundo, pero, sin embargo, imperecedera, porque no es hecha de manos, no es corporal.
Jesús, por los consejos y necesidades de los padres y familiares, nos desviamos de un mayor compromiso contigo. Vemos tu ejemplo de que ni siquiera tu madre, incluso sin pecado, te pudo apartar de la voluntad del Padre y de sus obras.
Los elegidos de Jesús, y todos nosotros, estamos constantemente librando guerras internas y externas. Satanás nos ataca a través de lo temporal, creado, transitorio que está en nosotros y alrededor de nosotros. Es una guerra santa que no podemos librar solos, con nuestro entendimiento humano y nuestras fuerzas. El Espíritu Santo multiplica nuestra fe en lo invisible y nos limpia de todo lo pasajero, sensato, racional, e inteligente y sabio para nuestros familiares. El Espíritu fortalece la confianza de Dios en nosotros, para que nuestra confianza humana disminuya y la confianza de Dios crezca. En el amor somos perfeccionados por el Espíritu Santo y crecemos en Divinidad a la imagen de Su Hijo Jesucristo, cuyo yugo es fácil y ligera la carga.
Espíritu Santo, nosotros, los miembros de Zdenac, hemos elegido ser tus "esclavos". Derrota a Satanás y sus obras en nosotros y a través de nosotros, en nuestro medio ambiente y en el mundo.
Hna. Ljilja Lončar
Reflexiones
La historia de la humanidad y de cada uno de nosotros está llena de la misma pregunta. Le hacemos esa pregunta a Dios y Él a nosotros. La pregunta le hizo Dios a Adán al comienzo del Génesis.
"¿Dónde estás?"
¿Dónde estoy? En el mundo donde me enviaste, Yahweh, donde los demás me están constantemente imponiendo, ofreciendo, pidiendo algo... ¡Me arrojaron al mundo sin que nadie me preguntara si lo quería y si estaba a la altura de los desafíos!
"¿Y dónde estás, Dios?"
Lejos, invisible, borroso...
¿Es así de veras?
Sé que no lo es. Me estoy engañando a mí misma echando la culpa a Eva, a mi madre, a mi Padre, a todos los que me rodean. Y la verdad es simple: Juego a ser Dios hasta que las cosas se salen de control. Juego a ser Dios mientras puedo vender mi importancia, inteligencia, belleza ... mientras puedo sacar provecho de Tus dones.
¿Y cuando las cosas se salgan de control? Me convierto en la multitud que llama constantemente a tu puerta, y te suplico que me salves de mí mismo. ¿Y tú?
Llevas mi carga a Gólgota una y otra vez.
Suzana